viernes, 20 de junio de 2008

Encadenada


Una ves mas creí que mi enfermiza dependencia se había ido. Que había volado como vuelan las hojas en otoño, o como emigran las golondrinas cada invierno…
Pero compruebo que sigo siendo esclava de tus palabras, tan sin poder evitarlo.
Cómo fue que de un día para otro yo era libre y hoy me encuentro prisionera de tu amor que me ciega, no lo se. Pero se que no puedo alejarme, irme seria demasiado satisfactorio, y no estoy acostumbrada a ser feliz. Sin embargo intento escaparme de tu encierro, pero son en vano mis intentos desesperados, me encuentro atada a ti, valla a saberse por que fuerte
cadena invisible.


Tu control permanente y tu forma de manipularme me impresiona, ¿como es que logras dominarme si yo nunca te lo permití?

martes, 17 de junio de 2008

Te fuiste.


Son las diez.
Miro el teléfono que permanece enfrente mio, mudo por supuesto. Podes llamarme ingenua, pero tengo la esperanza de que suene, atender y escuchar tu voz entrecortada, diciéndome que solo me llamas para oír el sonido de la mía.
Me olvide de decirte que mi habitación te extraña, le hace falta tu presencia en las mañanas de invierno, le hace falta ver los besos que me dabas antes de irnos a dormir, grita en silencio palabras que no escucho,
palabras que no dijiste.
Omití que yo también te extraño, miro por la ventana con la esperanza de verte aparecer con margaritas y que me digas: -perdón mi cielo, es tarde para cenar?. Y responderte que no, con la mejor de las sonrisas, esa sonrisa que dibujabas vos cada día en mi cara.
Extraño las noche de amor, y también aquellas en donde lloraba por vos, extraño tus abrazos en las películas de terror, y sentir el roce de tu mano mientras charlábamos al lado de hogar, sintiendo su tibio calor, o tus te amo distraídos… Daría inclusive lo que no tengo por que vuelvan esos pequeños gestos que yo no valoraba.
Te confieso que tu optimismo y tu forma de ser despreocupada brillan por su ausencia en esta casa, y que tus besos suaves y duraderos le hacen falta a mis labios.
Se que falle, y que el error fue mío, pero levantarse temprano en invierno duele, y no acariciarte al despertar se siente extraño.
No te pido que me perdones, solo quiero conversar, contesta mis frecuentes llamadas,
tu indiferencia duele mas que mil puñaladas.
Te necesito, comprenderás que me es imposible vivir sin vos, ¡si solo hubiera una forma de retroceder el reloj, y con él volver el tiempo atrás cuando mis días no eran angustiantes y podíamos sentarnos a planear un futuro juntos!, te aseguro que hoy es lo que mas quiero.
Te fuiste, pero no lo hiciste solo, te llevaste mis sueños rotos, y las ilusiones que no concretamos esas que quedaron guardadas en el primer cajón de la mesita de luz, te adueñaste de mi corazón, y me arriesgo a decir que también de mi cordura

Martina.P

lunes, 16 de junio de 2008

Un respiro


Te sentís mal? decís que te cansa esta rutina, y que no entendes la locura colectiva?
Tengo la solución, podes verme a las 3, si llegas puntual vas a tener que esperarme por que no soy amiga de los relojes.
Cuando me veas tomame de la mano y decime: -ayudame a olvidar.
Quizás te mire de reojo, pero vos tranquilo, es solamente parte de la actuación, voy a volverme hacia vos y decirte: -
cuando te hallas alejado de la multitud te vas a sentir mejor.
Que no te importe la gente que camina como hormigas, podemos detenernos a esperar que se detenga, o podemos avanzar independientemente de lo que hagan las otras personas,
vos sabes que odio ser ‘una más’.
Cuando lleguemos al fin de la ciudad, vas a comprobar que es más fácil respirar
Corramos, dale dame la mano. Nunca pensaste que mas allá del sol había un lugar mejor?, te puedo llevar. Vamos avanza, no siempre es fácil dar el primer paso, sin embargo después va a ser sencillo, te lo aseguro, te va a gustar.
La tarde va a pasar, vas a comprobar que el tiempo se pasa volando cuando uno se divierta. Todo se termina, pero queda en la memoria.
Podes llamarme cada vez que necesites un respiro, Rosario puede ser nuestro, siempre que quieras ser mi amigo.

jueves, 12 de junio de 2008

MyP

El 13 podria ser el numero de la mala suerte,
pero creo que tenemos suerte de cumplir 13 meses nosotros.
Fueron los mejores gracias a tu amor,
Te amo Pablo.

miércoles, 11 de junio de 2008


No busco la prefeccion.
NO, solo intento poder convivir con migo misma
(admito que a veces se hace dificil).

lunes, 9 de junio de 2008

Nomeolvides


En la celeste pequeñez de sus pétalos, la flor que conocemos como
“nomeolvides” guarda el recuerdo de una tan bella como triste historia de amor y debe su nombre a esa historia.

-Imagino dos chicos enamorados...
Ella: Silke; él, Erwin; los dos asisten a uno de los últimos grados de la escuela
elemental y, como buenos alumnos que son, se sientan en los bancos del fondo del aula.
Silke un poco más atrás, invariablemente. (Es que Erwin no se lleva muy bien que
digamos con las tablas de multiplicar...)
Sus compañeros se intercambian miradas picaronas cada vez que los ven alejarse
juntos, a la salida de las clases. Pero a Erwin y a Silke no parece afectarles. Es más, ni
siquiera lo advierten, entretenidos en sus charlas cuando abandonan el aula. Luego,
recorren las cuadras que los conducen desde la escuela a sus hogares, cada uno en su
bicicleta.
Se despiden frente a la relojería de la calle Wiesen. En esa esquina, Silke dedica
a su amigo la última sonrisa del día y éste le devuelve un guiño. Eso, cuando no están
enojados por alguna tontería...
¡Y continuamente los separa alguna tontería!
En ese caso, uno gira velozmente hacia la izquierda y la otra dobla hacia la
derecha, cada cual rumbo a su casa y como de costumbre, pero sin mirarse.
Sin embargo, las peleas entre ambos no duran demasiado. Erwin sabe qué hacer
para que los labios de su amiga se estiren en una nueva sonrisa: se las ingenia para
encontrar alguna hierba, hoja o flor que Silke no haya conseguido aún para aumentar su
colección, ésa que reúne en las páginas de un cuaderno de tapas blancas.
A ella le apasionan las plantas. Asegura que, cuando crezca, será la mejor
jardinera de toda Europa.
Entretanto, riega las macetas que se alinean en cada ventana de su casa y
colecciona cuanta hoja o flor encuentra, colocándolas con delicadeza en las páginas de
su herbario.
Claro que, para ella, las que le regala Erwin son las más preciadas.
Mira si no: debajo de todas anota el nombre de la especie, con su letra delgada y
derechita, pero siempre escribe varios renglones al pie de las que le obsequia su amigo.
O las distingue con breves rimas de su propia creación.
Es una joyita el herbario de Silke. Y ahora vas a saber por qué.

Abro el cuaderno de tapas blancas...
“HERBARIO DE SILKE” y, más abajo, “FELIZ NAVIDAD”, se lee en la
primera página. Son las únicas palabras escritas con letra gótica2 y no son obra de la
mano de una niña.
Desde la segunda página en adelante, pequeños ramitos u hojas solitarias,
manojillos de flores chiquititas o grandes ejemplares únicos, se suceden a lo largo de
casi todo el cuaderno. Están prolijamente dispuestos debajo de rectángulos de papel
celofán, frágiles vitrinas que evitan el deterioro.
Seca, inmóvil como una mariposa de ilustración, cada muestra exhibe forma,
textura, pétalos o nervaduras con toda claridad. A Silke le encanta pasar levemente se
dedo índice sobre cada una de ellas, mientras echa a andar su imaginación por los
caminitos que le señalan esta suerte de pequeños mapas vegetales... Por eso, escribe, por
ejemplo...
Margarita
-Tiene la cabeza rubia y usa cintas blancas como una chica que yo conozco... –
me dijo Erwin al regalarme esta flor. La había cortado un ratito antes de llegar a clase.
aún temblaban sobre sus pétalos las gotas de rocío.
La sacudí porque me parecieron lágrimas y no quiero que mis flores estén tristes.
Ramita del árbol de Navidad de Erwin
Junto con una pulsera hecha por él con agujas de pino, Erwin me trajo ayer esta
ramita. La adorné con estrellas recortadas del papel de los regalos. Es como si pudiera
guardarme para siempre un retacito de la hermosa Navidad que pasamos.
Rosa
Esta rosa de pétalos marchitos...
Esta rosa flotaba en un charquito...
Mi buen Erwin la salvó
del olvido.
Que nos una a él y yo,
Hoy le pido.

Tal cual te dije antes, Silke muestra su preferencia por las hojas y flores que le
regala Erwin. A las que ella misma ha recogido, sólo las nombra.
Así, se van intercalando y sumando “violetas de los Alpes”... “hojas de
muérdago”...“clavel”... “anémona”... “azahares”..."tulipanes" ...
“campanillas”... “pensamientos”...

La colección se interrumpe, de repente, cuando aún quedan por usar muchas
páginas del herbario. Como a las anteriores, el paso del tiempo las ha amarilleado pero
éstas, acaso por lo desiertas, parecen más melancólicas...
Hay que llegar al final del cuaderno para encontrar nuevamente flores. Es un
manojito de
nomeolvides
. Silke lo anuncia inmediatamente debajo, antes de escribir las
líneas con que concluye el herbario.
Después volveremos a esta última página. Ahora cierro el cuaderno y te pido que
prepares tu corazón para escuchar el desdichado final de esta historia.
Sí. Termina mal. Ya te advertí al principio que es tan bella como triste... Es
cierto, podría inventar un final feliz, pero eso sería mentirte, porque la vida también trae
penas gigantescas.
Voy a contarte, entonces, lo que sucedió mientras el cuaderno quedó olvidado.
Para ello...

Elijo un río en el mapa alemán (me decido por el Isar)
A caminar junto a sus orillas van Silke y Erwin. Es día de excursión. Pero no
van solos, por supuesto; son demasiados niños todavía... Herr Berger, su maestro, y
todos los compañeros marchan con ellos.
Erwin y Silke pronto se las arreglan para quedar un poquito rezagados.
¡Qué delicioso es escapar por unos minutos de la vigilancia del maestro, sacarse
los zapatos y retozar descalzos sobre la hierba!
-¡Si nos viera Herr Berger! ¡Los dos a los primeros bancos, como penitencia,
durante una semana!
Pero Herr Berger no los ve, seguro como está de que ninguno de sus alumnos se
atreverá a desobedecer su orden de no apartarse del grupo.
Aunque.. ¿es que Erwin y Silke están en realidad desobedeciendo?
No, son chicos, simplemente; chicos distraídos por el sol; chicos embriagados
por el aire libre de esa mañana; chicos enamorados que juegan a ver quién de los dos
encuentra primero una flor para el herbario...
-¡Te gané, Erwin! –exclama de pronto Silke- ¡Florcitas celestes!
-¿Dónde?
-¡Allá, en la ribera! ¡Más adelante!
-¡Voy a cortarte un ramito!
Y disparando sale el muchacho, hacia el sitio que le indica su amiga.
-¡No, Erwin! ¡Es peligroso! ¡No te acerques al borde! ¡Me basta con mirarlas
desde aquí!
Sordo a su pedido, Erwin va hacia la orilla del río hasta que Silke no distingue
más que su luminosa cabeza rubia.
Corre ella detrás. Casi lo alcanza en el momento en que él arranca un ramillete.
Entonces, la pena gigantesca: Erwin da un traspié y resbala al agua.
Logra arrojarle el manojito a su amiga, mientras el mismo grito desgarra su
garganta y el corazón de la niña: -¡No me olvides!
No me olvides... Vergiss mein nicht, en idioma alemán.
Se lo lleva la correntada.
Son inútiles los desesperados intentos de salvarlo que hace el maestro.
No me olvides...
A los pies de Silke, dispersas aquí y allá y sin saberlo, un montón de florcitas
silvestres acaban de recibir su nombre.
¿Volvemos a abrir el cuaderno?
Su última página.
Debajo del ramito seco se lee:
-Ya pasaron tres meses sin Erwin.
Ayer a la mañana, mamá me llevó a visitar su sepultura por primera vez.
En cuanto me dijo que ya podía empezar a levantarme, le rogué que me
permitiera ir al cementerio.
Al principio se negó. Tuve que insistir mucho para obtener un sí.
Aunque mis piernas no están aún lo suficientemente firmes y me parecía andar
sobre algodones, me siento bastante mejor de salud, casi repuesta.
Por eso no entiendo por qué, en cuento volvimos a casa, mamá me ordenó que
regresara al lecho. Dice que todavía no estoy curada, que la debilidad me hace ver cosas
inexistentes. Telefoneó de inmediato al Doctor Helbig, quien me revisó anoche y volvió
a visitarme este mañana. Se acaba de ir. Luego de cuchichear con mamá en la sala, me
recomendó más reposo y reforzó la dosis de los medicamentos.
Sin embargo, yo sé que no fueron visiones...
¡Cómo se recorte entre el verde de alrededor!
Porque la hierba que crece sobre el lugar donde descansa mi queridísimo amigo
es celeste. Celeste.
Como estas florcitas silvestres que bauticé “nomeolvides”.



Elsa bornemann
"No somos irrompibles"

domingo, 8 de junio de 2008

Enamorarse Duele




El amor puede ser algo magnifico, que nos llena nos completa, nos hace sentir felices, capaces de tocar el cielo con las manos.
El amor puede hacernos felices, o mejor dicho la persona que amamos puede hacernos felices, podemos pensar que es ideal, que es aquella persona que tanto esperábamos, puede hacernos ver el mundo color rosa, sentir mariposas en la panza cuando la vemos u oímos su voz, y vivir así, siendo prisioneros de una falsa felicidad.
Pero inesperadamente puede pasar que aquella persona que creíamos haber encontrado, que creíamos que iba a completarnos, ser nuestra mitad, amarnos y enseñarnos el significado del amor, y mostrarnos el camino hacia la felicidad y ser feliz junto a nosotros, no sea realmente la persona que nosotros pensábamos, y que lo que nos mostraba era solamente algo ficticio, fingido, una mentira. O quizás puede pasar que aquella persona se convierta en otra, y así ver que no es de quien te enamoraste, que cambio, y que de quien tu te enamoraste jamás volverá…Y qué triste es ver como nuestro príncipe/princesa ideal se convierte en verdad en una persona mas, y que triste también es haber creído que lo/la habíamos encontrado, que era mágico e ideal… y ahí es la parte en donde decimos por que enamorarse duele? Por que la gente busca el amor si tanto hace sufrir, si deja el alma hecha pedazos, sin que nadie pueda arreglarla, si causa heridas que no borra el tiempo. Y sufrimos, nos peguntamos como hacer cuando la única persona que puede hacer que dejemos de llorar es aquella por la que lloramos?. Y solamente escuchamos nuestro llanto en silencio, y comprobamos que esas preguntas que nos atormentan jamás tendrán respuesta
Es cierto que el amor es lo mas parecido a la magia, y que enamorarse es hermoso, pero el amor nace crece y muere, como todo, es parte de la vida y la naturaleza, y al irse deja su huella, así como también dolor, y el recuerdo de lo que fue felicidad en algún tiempo...

sábado, 7 de junio de 2008

Falsa prisión

A través de los cristales mojados veo como mi pequeño mundo se desmorona, sin poder hacer nada me encuentro atrapada.
Me atormentan mis pensamientos, el recuerdo de esas cosas que no hice.
Veo mi vida pasar ante mis ojos i trato de buscarle un sentido, pero es como un enorme rompecabezas del cual me falta una pieza primordial.
Por fin me doy cuanta de que nunca logre concretar nada, que todo lo que logre fue con mentiras.
Sumergida en mis pensamientos me olvido del mundo.
De repente veo resbalar una lagrima por mi mejilla, seguida por otra y otra mas, luego mi vista se nubla, y lloro.
Aturdida, sumergida en este mar de lagrimas y de tristeza intento escapar.
Pero me horrorizo al comprobar que todas las puertas están cerradas